La golfista balear se
sobrepuso a la firme oposición
de la castellonense, separadas
finalmente por dos golpes, que
en Pedreña buscaba su cuarto
título consecutivo
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uando dos jugadoras de la calidad de
Luna Sobrón y Natalia Escuriola tienen
el juego en orden y están con
confianza, ocurren cosas como las que se
vieron en el Real Golf de Pedreña (Cantabria),
sede de la decimoquinta edición del Santander
Campeonato de España de Profesionales
Femenino 2018.
Fue un cara a cara magnífico, plagado de
buenos golpes y birdies, que derivó en un
final apretado, fruto de la constancia de
Natalia Escuriola, feroz en la búsqueda de su
cuarto título consecutivo, y del temple de
Luna Sobrón, que puso el final más feliz
posible para una temporada notable.
La jornada final amaneció con un sol
espléndido, el mismo que acompañó a las
treinta jugadoras durante los tres días de
competición, pero el ambiente estaba más
cargado que en las fechas previas. En el
putting green en el que afilaban armas Luna
Sobrón y Natalia Escuriola, esta vez
predominaba el silencio, síntoma de
concentración y responsabilidad.
La mallorquina se sabía ante la oportunidad
de ganar su primer Campeonato de España
Profesional y, de paso, de tomarse la revancha
por la cantidad de veces –“¡han sido unas
cuantas!”, decía entre risas en la previa– que
Natalia Escuriola le había arrebatado la gloria
en categorías inferiores. Para la castellonense
también era difícil abstraerse de una realidad
irrefutable: en caso de victoria habría hecho lo
que nunca nadie hizo antes, ganar cuatro
Campeonatos de España de Profesionales. La
tensión, pues, era lógica.
Las ausencias de Azahara Muñoz, Carlota
Ciganda o Beatriz Recari quedó compensada
sobradamente por la actuación estelar de
una Luna Sobrón que demostró del primer al
último hoyo que es una golfista LPGA. Juego
y actitud le sobran para hacerse un hueco
entre las mejores golfistas del planeta.
Cómoda última jornada para
Luna Sobrón… hasta el hoyo 12
En Pedreña ganó con -9 al total y dos golpes
de ventaja sobre Natalia Escuriola, que sacó
toda la garra que lleva dentro para hacer
sufrir a su amiga y rival hasta el último putt. Y
eso que Luna Sobrón manejaba una cómoda
renta de seis golpes en el tee del 12. Fue ahí
donde la vuelta se le empezó a complicar, y
de qué manera. Un 8 en la tarjeta de la
mallorquina dejaba en cuatro golpes una
ventaja que disminuiría de nuevo en el 14 con
un nuevo birdie de la castellonense, que a
partir de ese momento comenzó a tomar
más riesgos, a buscar el trapo con descaro
para intentar meter en apuros a una líder
hasta ese momento imperturbable.
Y la táctica funcionó en el hoyo 17, un par 5
en el que se anotó un birdie que hubiese sido
únicamente anecdótico si no fuese porque el
putt corto para par de Luna Sobrón se
quedaba colgando del hoyo. Bogey y la
distancia que se reducía a un solo golpe.
Máxima tensión a falta del hoyo 18, un par 4.
Luna Sobrón jugó con maestría el hoyo,
tratando de dejarse una opción de birdie que
le permitiese jugar para ganar hiciese lo que
hiciese Natalia Escuriola. Y la golfista
levantina, todo garra y pundonor, volvió a
buscar la bandera, pero esta vez sin éxito. El
par de Luna Sobrón y el bogey de Natalia
Escuriola sellaban la victoria de la primera,
que se cobraba así cumplida venganza de
sinsabores pasados.
Santander Campeonato
de España Pro Femenino
Luna Sobrón
rompe el dominio de Escuriola
