L
a 42ª edición de la Ryder Cup será
recordada por los tiempos de los
tiempos como aquella en la que un
español, Sergio García, se convirtió en el golfista
con más puntos ganados en la historia del
torneo: 25,5. Su inestimable aportación para la
consecución de una nueva victoria del cuadro
europeo (17,5-10,5) vino a confirmar que el
capitán Thomas Bjorn hizo bien, muy bien, en
reclamar sus servicios. El castellonense alargó
en París su idilio con esta competición única en
la que, además, se produjo el esperado debut
de Jon Rahm. Memorable.
Una trayectoria Ryder
simplemente espectacular
Con su triunfo en la última jornada ante Rickie
Fowler (2/1), Sergio García logró su tercer punto
de la semana y superó el récord del inglés Nick
Faldo, confirmándose como un bastión
histórico para Europa. Esa victoria ante Fowler
ayudó a contener el empuje del potente
equipo norteamericano en la decisiva tanda de
partidos individuales en Golf National.
En las dos jornadas anteriores el castellonense
había sumado en compañía de Alex Noren en
los foursomes del viernes y de Rory McIlroy en
los fourballs del sábado. Solo Bubba Watson y
Webb Simpsom pudieron evitar el pleno de
triunfos del español, que cayó conjuntamente
con el golfista sueco. A esa semana triunfal se
apuntó Jon Rahm, que al igual que Sergio
García lució durante toda la semana el lazo
amarillo en recuerdo de la añorada Celia
Barquín, jugadora de la Escuela Nacional Blume
en su día como él. El vasco firmó otro de los
momentos estelares del torneo: su victoria
ante Tiger Woods, un hombre con 14 Grandes
y que llegaba al torneo con aura de renacido.
Jon Rahm le ganó en el hoyo 17, y su efusiva
celebración habla a las claras de su liberación
por el punto obtenido. Resolvió un duelo tenso
que manejaba 2up al 8, pero que Tiger Woods
supo equilibrar mediado el partido. Los hoyos
13 y 14, ambos para el español, fueron clave en
el desarrollo de esta fantástica batalla. En esa
última jornada, las victorias individuales de
Sergio García y Jon Rahm, unidas a las de
Henrik Stenson, Alex Noren, Francesco Molinari,
Thorbjorn Olesen e Ian Poulter, derivaron en un
espectacular festejo en Golf National. El más
buscado no podía ser otro que Sergio García,
que llegó como elección del capitán y se fue
como héroe.
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Ryder Cup
Sergio García se
convirtió en el
golfista con más
puntos ganados en la
historia del torneo,
25,5, una aportación
asimismo patente en
la consecución de
una nueva victoria
del equipo europeo
en 2018
Sergio ‘Ryder
García’
Ni Dustin Johnson, ni Jordan Spieth, ni Justin Thomas,...
Sergio García al margen, los grandes protagonistas de la
Ryder Cup 2018 fueron Francesco Molinari y Tommy
Fleetwood, la pareja de moda en Europa. Cuatro veces
jugaron juntos, cuatro victorias consiguieron. Tan fuerte
fue su impacto en el torneo que se hicieron acreedores
de una pegadiza canción que les acompaña desde
entonces.
Moliwood
la pareja de moda
Reacción furiosa
tras un inicio errático
El equipo europeo afrontó ese domingo los
doce individuales en una situación franca (10-
6) para recuperar la Ryder Cup, pero no toda la
semana fue placentera. El viernes arrancó la
competición con unos fourballs en los que el
combinado estadounidense pareció dar la
razón a aquellos –no pocos– que decían que
estábamos ante el mejor equipo de la historia
del torneo. Con Sergio García en el banquillo y
Jon Rahm formando pareja con Justin Rose –
cedieron ante Tony Finau y Brooks Koepka en el
18–, Estados Unidos se puso en ventaja (3-1).
Pero ahí acabaron las buenas noticias para el
equipo de Jim Furyk. Los foursomes de la tarde
terminaron con un demoledor parcial de 4-0
para el conjunto europeo, llevado en volandas
por el ambientazo del campo parisino. Sergio
García y Alex Noren batieron a Phil Mickelson y
Bryson Dechambeau por 5/4 en lo que fue el
inicio de una reacción furiosa e imparable.
Ningún partido llegó al hoyo 17 en una tarde
histórica, dado que nunca Europa se había
adjudicado los cuatro foursomes.
La jornada del sábado dejó un nuevo vendaval
europeo, esta vez en los fourballs de la
mañana, que finalizaron con un parcial de 3-1.
Sergio García sumó punto junto a Rory McIlroy
ante Tony Finau y Brooks Koepka, mientras que
la victoria se le escapó en los hoyos finales a
Jon Rahm, que formó una pareja explosiva con
Ian Poulter. Por la tarde, Estados Unidos supo
detener la hemorragia con un reparto de
puntos en los foursomes que abría las puertas
a la esperanza americana. Sergio García, en
esta ocasión con Alex Noren, cedió ante Bubba
Watson y Webb Simpson (3/2), mientras Jon
Rahm afilaba sus armas para el fenomenal
enfrentamiento ante Tiger Woods. El joven
español se preparaba para lo que se venía ese
domingo: un día inolvidable.
