estadounidense Tiger Woods, que permane-
ció 683 semanas consecutivas en la cima.
En nuestros días, el tercer golfista español con
los dos pies en el Top 20 mundial es Rafael
Cabrera-Bello, cuya carrera profesional fue
arrancando en modo diesel pero que lleva un
par años sin levantar el pie del acelerador.
El canario nunca gripa, es la constancia hecha
deportista, una virtud que es oro en este juego.
Su victoria el año pasado en Escocia le llevó
directamente al puesto 17 y su cuarto puesto en
el British Open le permitió escalar hasta el 16. En
los últimos dos años ha hecho del Top 50 el
salón de su casa, alcanzando el estatus de juga-
dor Ryder y, más importante aún, ganándose el
respeto de las grandes figuras mundiales.
La Armada
siempre dando juego
Otros golfistas españoles también han irrumpi-
do en el Top 100 del Ranking Mundial en los
últimos lustros. El más asiduo de ellos, el incom-
bustible Miguel Ángel Jiménez, que si bien es
cierto que al cierre de este número se encuen-
tra en el puesto 391 (sus apariciones en el
Champions Tour no computan en la elabora-
ción del Ranking) ha llegado a estar en el deci-
mosexto peldaño.
Ocurrió después del US Open de 2000, prueba
en la que fue segundo por detrás, cómo no, de
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Tiger Woods. Ahí se instaló en esa decimosexta
plaza, en contacto directo con Darren Clarke o
Nick Price. El Top 20 también lo acarició poste-
riormente con sus triunfos en el Wales Open
(2005) y el BMW PGA Championship (2008).
Todos estos datos ponen de manifiesto que el
andaluz es un golfista que se ha codeado con
lo mejor de varias generaciones, lo que le otor-
ga aún más mérito.
Álvaro Quirós, por su parte, también ha pro-
bado las mieles del éxito con repetida fre-
cuencia. Sus victorias en Dubai allá por 2011
le dejaron a las puertas del Top 20 (puesto
21) y le asentaron como uno de los referentes
españoles para las generaciones venideras.
También Gonzalo Fernández-Castaño se ha
movido con cierta frecuencia entre los 50
mejores del mundo, especialmente entre
2008 y 2014. Su tercer puesto en el Arnold
Palmer Invitational de 2013 –en el que ganó,
oh, sorpresa, Tiger Woods– le llevó hasta la
casilla 27 del escalafón mundial.
El barcelonés Pablo Larrazábal es otro de los
golfistas que con más insistencia ha llamado
a las puertas del grupo de los mejores juga-
dores del planeta. Inquilino habitual del Top
100 en los últimos años, acarició el Top 50 en
2008 con su recordada victoria en el Abu
Dhabi HSBC Golf Championship de 2008.
También pisaron Top 100 en el pasado Ignacio
Garrido, Miguel Ángel Martín, José Rivero, José
Manuel Lara, Carlos Rodiles o Alejandro
Cañizares. Y ahora se asoma a ese privilegiado
ámbito el cacereño Jorge Campillo (puesto
102), al que sus últimas actuaciones en el
European Tour están empujando hacia arriba.
Tanto el golfista extremeño como Adrián Otae-
gui, Nacho Elvira, Pedro Oriol, Scott Fernández,
Samuel del Val, Javier Colomo... se suman una
semana sí y otra también a contribuir con su
talento y esfuerzo a la importante tarea de
seguir haciendo grande nuestro golf.
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Ranking
Mundial
Sergio García, José
María Olazábal,
Miguel Ángel Jiménez
o más recientemente
Rafael Cabrera-Bello
han teñido de color
español la parte alta
del Ranking Mundial
en los últimos años
