RFEGolf141 (diciembre 2025 - febrero 2026)

rfeg olf 65 64 rfeg olf M iguel Ángel Jiménez ha resurgido. No le hacía falta, porque en la década que lleva en el Champions Tour nunca ha dejado de ser uno de los jugadores estrella, pero sus cuatro victorias en 2025 -’major’ incluido- le han devuelto a la primera fila del golf mundial senior. A sus 62 años, el ‘jugador más interesante del mundo’, que dicen los británicos´, no ha perdido un ápice de su carisma. Sigue siendo el ‘Pisha’, en Estados Unidos y en su escuela de Torremolinos, donde nos recibe para brindarnos una deliciosa charla sobre el golf y la vida. Vaya año en el Champions Tour… Sí, desde el primer torneo ya estuvimos ahí arriba. Al segundo ya gané. Llevaba dos años sin conseguir la victoria y este año me he resarcido con esos cuatro triunfos, resaltando además la del TPC, que es uno de los ‘majors’ que tenemos los seniors. Ha sido una temporada muy buena. ¿Te ha quedado el sinsabor de no ganar finalmente el Orden de Mérito? Sí, porque he liderado la clasificación durante prácticamente todo el año, y justo al final, en los últimos cuatro o cinco torneos, el juego no ha estado a la altura de las circunstancias, sobre todo en los dos últimos. Me ha fastidiado, el hecho de que contarán doble los tres últimos torneos. Si hubiesen puntuado normal hubiese ganado yo, pero en fin… es lo que hay. ¿Este repunte tan brutal de este año corresponde a algo en particular? No, la pretemporada fue igual. He mejorado un poco en el green y es cierto que lo más importante es el putt, que la bolita entre. Esto es así desde antiguo: el drive da la gloria y el putt, la victoria. No ha habido cambios en el swing, ni en la forma de entrenar, ni en nada. Lo básico es mantener la elasticidad y el trabajo. Llegamos a unas edades, con 62 años, en las que man- tener la elasticidad es lo más importante, y eso se hace entrenando. ¿Disfrutas más ahora en el Champions que durante tu época anterior jugando Grandes? Lo estoy haciéndolo de distinta manera. Para mí competir siempre ha sido un disfrute. Vivo de ello, es lo que me motiva a seguir viajando. Esa tensión, esa presión... Cuando juegas los torneos del Tour tienes tu presión, con tu corte, el poder ganar... Sin duda tiene mucho mérito En el circuito senior es un poco más relajado. Hay tres vueltas sin corte, quitando los ‘majors’, pero la competencia es feroz. Tienes que ver la gente que hay ahí: Stewart Cink, que tiene 51 años, Retief Goosen, Ernie Els, Padraig Harrington... magníficos jugadores. Y mira los resultados que se ven, -15, -18... y en tres días. Aún así es algo más distendido, venimos de vuelta y supongo que por eso sonreímos más. ¿Cómo es ahora la vida de Miguel Ángel Jiménez? La vida, cuando estás de campeonato, es igual en todos lados: llegas el lunes, juegas el campo, tienes el ProAm y luego a competir hasta el domingo. Luego haces tu vida normal, lo único que varía es el tema de las tres vueltas. Pero yo, en Estados Unidos, no hago vida más allá de los torneos, el resto del tiempo resido en República Dominicana. Vivo en Casa de Campo, con cinco campos de golf al lado y otros tantos cerca donde puedo trabajar mi actividad. Echando la vista atrás, ¿cómo pasa un hijo de albañil a jugar 724 torneos en el DP World Tour? Nosotros somos siete hermanos de dos familias humildes. Pobres. Es la necesidad la que te hace llegar a los sitios. Me hablan de suerte, pero yo creo que el único golpe de suerte que he tenido en mi vida es haber encontrado el golf. Esto es lo que quiero hacer en mi vida desde que lo conocí. ¿Cómo empezaste a jugar? Con 15 años, cuando terminé el colegio, y había que tra- bajar, había que comer. Comencé a ganarme las pesetillas haciendo de caddie, tirando de la bolsa. Acabé el colegio básico y no tenía más opción de seguir estudiando. Empecé a tra- bajar en un taller de mecánica, pero cerraron a los dos o tres meses -no fue por mi culpa, eh- y mi hermano Juan, que es doce años “El golf es una manera de vivir” Entrevista Miguel Ángel Jiménez En el Champions Tour hay una competencia brutal, mira los nombres que hay ahí. Pero es algo más distendido, venimos de vuelta y supongo que por eso sonreímos más” “Me hablan de suerte, pero yo creo que el único golpe de suerte que he tenido en mi vida es haber encontrado el golf” “