Lady Golf Magazine 105 (octubre 2024)

P or la vía de la contundencia, el equipo estadounidense cortó la racha de triunfos europeos en la Solheim Cup, que se prolongaba desde 2017, imponiéndose con claridad en el recorrido de Robert Trent Jones, en la lo- calidad de Gainesville (Virginia). El 15,5-12,5 final fue consecuencia del fantástico arranque local en la primera jornada, cuando Europa llegó al final de ese primer día con un doloroso 6-2 en contra. Los foursomes abrieron el fuego con Car- lota Ciganda compartiendo pareja con la sueca Linn Grant, un equipo que re- sultó muy productivo en la edición del año pasado. Sin embargo, en esta oca- sión el resultado no fue el deseado: ca- yeron ante Lilia Vu y Sarah Schmelzel por 3/2. En esa tanda, sólo Maja Stark y Emily Pedersen sumaron para las europeas. Tampoco fueron mucho más fructíferos los fourballs de la tarde, en los que des- cansó Carlota Ciganda. Las suecas Anna Nordqvist y Madelene Sagstrom se impu- sieron por un clarísimo 6/5, pero ahí ter- minaron las buenas noticias para Europa, ya que los otros tres partidos se los adju- dicó Estados Unidos sin llegar al hoyo 17. En la segunda jornada el cuadro estadou- nidense aguantó el empuje europeo. Car- lota Ciganda no sumó en los foursomes matinales en compañía de la danesa Emily Pedersen, con la que cayó en el último hoyo ante Allisen Corpuz y Nelly Korda en un partido de aúpa. Esta manga ter- minó con reparto de dos puntos por equipo, lo mismo que por la tarde, que- dando el marcador parcial en un 10-6 có- modo para las golfistas locales. LG M 27 LG M 26 Profesionales Solheim Cup 2024 USA ES MUCHO USA Estados Unidos mostró su autoridad ante Europa en la última edición de la Solheim Cup celebrada en territorio norteamericano, volviendo a inscribir su nombre en el palmarés en el que no figuraba desde 2017 A LA ESPERA DE UNA HAZAÑA QUE NO SE PRODUJO Esos cuatro puntos de ventaja con los que terminó la segunda jornada acabaron re- sultando una losa demasiado pesada para Carlota Ciganda y sus compañeras. No en vano, Europa necesitaba poco menos que una hazaña en los individuales, remontar un 10-6, aunque en algunos momentos se pensó que ese milagro era posible. Las victorias tempraneras de las inglesas Charley Hull y Georgia Hall se vieron con- trarrestadas por las de Megan Khang, Allisen Corpuz y Rose Zhang –en su caso, ante Carlota Ciganda–, todas ellas claras y meridianas. Los partidos posteriores fueron mucho más igualados, con op- ciones para Esther Henseleit, Maja Stark o Albane Valenzuela de poner picante a la resolución del torneo. Al final, algarabía local, homenajes a Lexi Thompson en la que fue su última Sol- heim como jugadora y resignación en el bando europeo, que en las últimas edi- ciones consiguió poner en entredicho la hegemonía estadounidense en el torneo. El 15,5-12,5 final fue consecuencia del fantástico arranque local en la primera jornada, cuando Europa llegó al final de ese primer día con un doloroso 6-2 en contra