RFEGolf119 (junio - agosto 2020)

A través de sus reflexiones podemos conocer un poco a más a un jugador trabajador, constante e inteligente, de esos que buscan la forma de progresar día a día para hacer más fuertes sus puntos fuertes y menos débiles los débiles. Un jugador “de feeling, pero feeling trabajado”, como él mismo se define. Lecciones de golf y de vida a cargo de Ignacio Elvira. Rutinas de trabajo “Intento ponerme un plan de trabajo y no salirme de él. Puede haber momentos en los que haga pequeños cambios, pero no debo olvidarme de aquello que me ha llevado a hacer las cosas bien. Y tanto si me van bien las cosas como si me van mal, tengo que ser fiel a aquello que he pactado con mis entrenadores y con mi círculo porque creemos que es lo que me ha ayudado a salir adelante”. La importancia de conocerse como jugador “Sinceramente creo que no es tanto un cambio técnico. No es que digas ‘si cambio esto voy a ser profesional o voy a ser el número uno del mundo’. Hemos visto durante años que todo el mundo tiene swings y técnicas diferentes que aplica en el campo para poder hacer resultados, que es lo más importante. Para mí el salto ha sido aprender a conocerme y aceptarme a mí mismo técnicamente. Saber cuáles son mis puntos fuertes e intentar aprovecharlos al máximo sin dejar de trabajar en mis puntos débiles. En mi caso, siempre he sido grande, he pegado bien los hierros y el driver y el putt los he tenido algo más descuidados. En los momentos en los que mi juego está más vulnerable intento aprovechar esa fortaleza en golpes de cien metros o así. En resumen, creo que además de trabajar a tiempo completo, conocer tus puntos fuertes y tener confianza plena en ellos es lo más importante.” Trabajar la mentalidad, una prioridad “Al igual que con el juego, la cabeza también hay que trabajarla, tanto los puntos fuertes como los débiles. Si le preguntas a los jugadores qué porcentaje de importancia tiene la cabeza en el juego, posiblemente te digan que el 75 o el 80 por ciento. Y si a continuación les preguntas que cuánto tiempo dedican a trabajar la cabeza, te dirán que muy poco. Yo es algo que he trabajado muchísimo, y de la misma forma que digo que no es sencillo reponerte de un mal inicio, también digo que eso se trabaja. Estar en el presente es lo más importante “Trabajo mucho estar en el presente, independientemente de las circunstancias en las que me encuentre. Es decir, no porque empiece una vuelta con doble bogey voy a terminar con 80 ni porque comience birdie, birdie, birdie voy a hacer -7. Cada momento y cada situación es único, de forma que lo importante es el golpe que vas a pegar en ese momento. Estar en el presente es lo más importante. Es complicado, pero se puede trabajar”. La paciencia como compañera de carrera “No tengo la respuesta porque yo sigo aprendiendo día a día. Puedo ofrecer mi receta. Yo llegué al Tour en 2014, y ese año perdí la carta. En su momento no me di cuenta, pero aprendí que la paciencia es muy importante. Una vez que llegué al Tour, para mí era vital mantener la tarjeta, y quería hacerlo ya en el primer mes, en el primer torneo. Y tienes que darte cuenta de que la vida de un golfista es muy larga -ahí está Miguel Ángel Jiménez ganando torneos con 55 años-, y hay que tener paciencia y saber estar en el presente. rfeg olf 83 82 rfeg olf Encuentro con un campeón C harlar con Ignacio Elvira sobre golf es siempre un enorme placer. Y si, además, el interlocutor es un jugador en pleno proceso formativo, se convierte en una lección de vida. Los chicos de las Escuelas Nacionales Blume sometieron al golfista cántabro a una larga e instructiva ronda de preguntas de las que emergieron algunos datos de su biografía desconocidos para muchos de los aficionados -¿sabían que a los 15 un médico le dijo que no podría volver a jugar al golf?- y una buena cantidad de lecciones. Vida & Golf por Ignacio Elvira Para mí el salto ha sido aprender a conocerme y aceptarme a mí mismo técnicamente. Saber cuáles son mis puntos fuertes e intentar aprovecharlos al máximo” “

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