RFEGolf119 (junio - agosto 2020)

rfeg olf 29 28 rfeg olf Apocalipsis que nos puede permitir incluso mejorar Lecturas del coronavirus C uando un acontecimiento de esta naturaleza sucede, es difí- cil resumir con un solo adjetivo cómo hemos vivido esta experiencia. Un análisis medianamente reflexivo no puede dejar de lado las diferentes face- tas de esta pesadilla. La Asociación de Profesionales de Golf de España es una organización bastante antigua, fundada oficialmente en el año 1972 a pesar de que en 1933 ya se sabía de su existencia. Tradicionalmente sus miembros dedican su vida a los campos de golf, a los campos de prácti- cas, a la competición y a la enseñanza. Nuestro fuerte no había sido la tecnolo- gía, sino el contacto personal. Sin embargo, este escenario neocatastrofis- ta nos ha forzado a evolucionar gracias a la tecnología que habitualmente no utilizamos Paradójicamente, la tecnología que a veces separa a los seres humanos nos ha permitido acercar al asociado descono- cido, al profesor de un campo de golf con el jugador de primera línea mundial y establecer un encuentro libre y perso- nal que fuera el mundo digital sería muy extraordinario. Asimismo creo que también fue impor- tante que la Asociación mantuviese una reunión con el Presidente de la RFEG, porque al final las relaciones institucio- nales no dejan de ser relaciones entre personas, y esa posibilidad de preguntar y comentar directamente se convirtió también en otro hecho extraordinario. Reunir a más de 100 personas en nume- rosas videoconferencias y crear ese marco de contacto ha sido una expe- riencia muy significativa frente a las habituales reuniones presenciales y asambleas mucho menos numerosas. La Asociación de Profesionales de Golf de España no ha parado ni un día desde que se anunció, el pasado 14 de marzo, el estado de alarma y confinamiento debido a la pandemia provocada por la expansión del virus COVID-19. Telemáticamente, claro, todos confina- dos, sin competición ni posibilidad de pisar un campo de golf, la PGA de España decidió aprovechar este tiempo de aislamiento para tener una comuni- cación más intensa, fluida y cercana con sus asociados, respondiendo también a sus necesidades de información y traba- jando duramente con las diferentes ins- tituciones del golf y del deporte (RFEG, CSD, AEGC, AECC, AEdG, la Plataforma de Asociaciones de Deportistas y AFE, Ministerio de Sanidad, etc) para, entre todos, crear un Protocolo de vuelta al golf que dio sus frutos. Jon Rahm inauguraba la serie de golfis- tas profesionales miembros de la PGA Sin competición ni posibilidad de pisar un campo de golf, la PGA de España decidió aprovechar este tiempo de aislamiento para tener una comunicación más intensa, fluida y cercana con sus asociados “ que han pasado por las videocharlas de nues- tra asociación. A él le siguieron José María Olazábal, Pablo Larrazábal, Álvaro Quirós, Adri Arnaus y su caddie Pello Iguarán o Miguel Ángel Jiménez. Charlas que, en la mayoría de los casos supe- raban las dos horas y un centenar de conec- tados a las redes, coordinados por Eduardo Celles, vicepresidente de la PGA España. Numerosa ha sido también la asistencia a los webminar organizados por la PGA, una palabra que se ha creado durante esta crisis y que ya forma parte de nuestro vocabulario diario, coordinados por José Vicente Pérez, director del área de Formación de la PGA; como tam- bién a otros seminarios organizados por la CPG. La respuesta de los profesionales a estas ini- ciativas ha sido sorprendentemente positiva, especialmente por la sensación de aprove- char el tiempo y conseguir unir y fortalecer el fundamento que mantiene a la PGA viva, ahondando en lo que es el compañerismo, sin importar en dónde ni en qué ámbito del golf trabaje uno. Ahora sabemos que podemos salir de esto y ya estamos preparando nuestros proyectos habituales para el otoño… Hace 65 millones de años lo que los dinosaurios consideraron un apocalipsis en masa permitía a los mamíferos como nosotros evolucionar hasta llegar a ser humanos. Las vidas humanas des- graciadamente no se pueden recuperar, pero los escenarios incluso pueden mejorar. 3 Por David Pastor Presidente de la PGA España