 
          
            LG
          
        
        
          M
        
        
          
            31
          
        
        
          
            LG
          
        
        
          M
        
        
          
            30
          
        
        
          
            Profesionales
          
        
        
          Ladies European Tour
        
        
          Laura Fuenfstueck, un manojo de nervios
        
        
          palmario, envío la bola fuera de límites en
        
        
          su primer golpe y, en el hoyo 2, encadenó
        
        
          tres golpes tremendamente defectuosos
        
        
          generando en ambos casos la misma con-
        
        
          dena: sendos dobles bogeys.
        
        
          Carlota Ciganda, casi sin haber calen-
        
        
          tado, pasó a dominar la clasificación con
        
        
          cierta holgura, dos golpes de ventaja
        
        
          que incluso se fueron ampliando aún
        
        
          más conforme se sucedían los hoyos, la
        
        
          navarra afinaba su putt –buenos birdies
        
        
          en los hoyos 6 y 7– y sus rivales de par-
        
        
          tido se enmarañaban en muchos de los
        
        
          puntos más complicados del bello reco-
        
        
          rrido de Sitges.
        
        
          
            Paso al frente
          
        
        
          
            de Esther Henseleit
          
        
        
          No obstante, no eran Laura Fuenfstueck
        
        
          y la finlandesa Sanna Nuutinen quienes
        
        
          constituían el verdadero peligro, que llegó
        
        
          de forma silenciosa pero no por ello ines-
        
        
          perada de otra jugadora alemana, Esther
        
        
          Henseleit, avalada por su recién estre-
        
        
          nado número 1 en el Ranking del Ladies
        
        
          European Tour, que tomó el relevo de su
        
        
          compatriota en el papel de rival de verda-
        
        
          dero peligro para la golfista española.
        
        
          Bien posicionada pero agazapada a lo
        
        
          largo de la mitad de la jornada, cuando
        
        
          dos bogeys consecutivos parecían des-
        
        
          cartarla igualmente de la lucha por el tí-
        
        
          tulo, Esther Henseleit dio un paso al
        
        
          frente con enorme energía, presentando
        
        
          con enorme seriedad su candidatura a la
        
        
          victoria final gracias a cinco birdies en
        
        
          siete hoyos, del 7 al 13, que ubicaron a
        
        
          la golfista teutona en el foco de todas las
        
        
          miradas.
        
        
          La emoción y la incertidumbre se insta-
        
        
          laron con fuerza sobre las calles de Golf
        
        
          Terramar, toda vez que la férrea sereni-
        
        
          dad de Carlota Ciganda se contagió de
        
        
          algunos atisbos dubitativos –bogeys en
        
        
          los hoyos 11 y 13 minimizados por un
        
        
          oportunísimo birdie en el 12– que estre-
        
        
          chaban la diferencia a apenas un golpe.
        
        
          Con esa mínima renta afrontó Carlota
        
        
          Ciganda sus cinco últimos hoyos de in-
        
        
          farto, donde las referencias de lo acon-
        
        
          tecido en el partido anterior, donde
        
        
          jugaba Esther Henseleit, eran continuos.
        
        
          Ninguna de ellas, sin embargo, fue capaz
        
        
          de mover su casillero ni a favor ni en con-
        
        
          tra, con la tensión a flor de piel, sendos
        
        
          cinco pares consecutivos que generaron,
        
        
          una vez que Carlota Ciganda rubricó su
        
        
          último hoyo, una electrizante corriente de
        
        
          admiración generalizada. Y es que la na-
        
        
          varra ya puede decir que ha completado
        
        
          su círculo victorioso en el Estrella Damm
        
        
          Mediterranean Ladies Open.
        
        
          
            Carlota Ciganda superó a la
          
        
        
          
            alemana Esther Henseleit por un
          
        
        
          
            solo golpe en un final de torneo
          
        
        
          
            tan atractivo como dramático